En un mundo donde los autos proliferan, las emisiones de CO2 suben y no hay tiempo ni para viajar despacio ni para quedarnos en casa, las bicicletas toman cada vez más protagonismo. ¿Conocés todos los beneficios de usarlas?
Quemá calorías, sentite mejor. En oposición al auto, que nos vuelve totalmente sedentarios, la bici nos obliga a estar en constante movimiento. En principio, ejercita tu cuerpo: con una hora de pedaleada, se pueden quemar más de 500 calorías. Además, ayuda al sistema circulatorio, previene el dolor de espalda, y ayuda a mejorar tu sistema inmunológico.
Pedaleá más, pagá menos. Frente a los crecientes precios del combustible, el hecho de que la bici funcione sólo con tu energía es un motivo que inclina mucho la balanza a favor de las dos ruedas. Usando la bici, te evitás tener que pagar pasajes de transporte público, combustible, ¡y el gasto de mantenimiento de la bici es mínimo!
Una vuelta por el mundo. Autos, colectivos, trenes y otros medios de transporte generan, de una manera u otra, impacto en el medioambiente. La bicicleta, además de caminar, es el único vehículo que no genera daños en la atmósfera, al no emitir dióxido de carbono ni tampoco consume energía eléctrica: sólo vos y tu propio energía.
Un buen ritmo para un mal espacio. Las calles están colapsadas de tránsito, y las horas pico hacen crecer nuestro estrés a niveles desmedidos. Una bici no sólo ayuda a agilizar tu avance por la ciudad, sino que también reduce la contaminación sonora y te ahorra el problema de maneje en la ciudad: la ciudad está llena de espacios donde estacionar la bici.
Preparados, listos, ¡ya! La Ciudad de Buenos Aires, como muchas otras, está cada vez más preparada para los conductores de bicicletas. La construcción de bicisendas es, sin dudas, una enorme apuesta para facilitar el pavimento compartido con autos y colectivos, minimizando las chances de accidentes. Además, la ciudad cuenta con un servicio de préstamo gratuito de bicicletas, para aquellos que puedan darles uso por plazos de una hora, yendo al trabajo o a la facultad.
Cómo éste, muchos hábitos pueden cambiarse en el día a día para colaborar con un mundo mejor. Podés conocerlos y sumarte a seguirlos en nuestro Contrato con el Medioambiente.
Los beneficios son muchos, y sólo se necesita una bici. ¿Será la bici una solución muy sencilla a uno de los problemas más complejos del mundo?
Y vos, ¿por qué la elegís? ¡Contanos tus ideas para sumar a la rutina y ayudar al medioambiente!
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ELEGI ANDAR EN BICICLETA !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!