Asentaron las dos mayores granjas del mundo ubicadas en el techo de edificios, en medio de la sobrepoblada ciudad de Nueva York. Llegando a abarcar 2,5 hectáreas, ya son un hito en la nueva era de huerteros urbanos.
Se bautizó al emprendimiento Brooklyn Grange y funciona como un proveedor de alimentos orgánicos para restoranes y mercados locales, al mismo tiempo que se aprovechan sus espacios como punto de encuentro, siendo que sus vecinos los sienten un agradable lugar para estar ¡incluso para casarse! Cosa que llegó a popularizarse en su agenda de eventos a esta altura del partido.
Para mantener la producción en movimiento, se las ingenian con herramientas singulares, como el ciclo de centrifugado de viejos lavarropas a la hora de secar las hojas verdes, además de que cuentan con la capacidad de entregar 90 kilos por día ♥
Llevan una impecable rutina (la cosecha se da los días lunes y jueves, por ejemplo), generan un perfecto abono de sus desechos vegetales, producen su propia miel al contar con más de 30 colmenas en diversos techos de la ciudad… variables que los ubican como grandes referentes en materia ambiental, motivo por el cual ya recibieron a más de 17 mil personas en tours guiados y talleres con el objetivo de transmitir sus invaluables conocimientos.
A fin de cuentas, Brooklyn Grange ya encarna su sueño de ofrecer alimentos frescos “y verdaderos” (así los llaman) en plena ciudad, colaborando a la neutralización de gases de efecto invernadero, demostrando al mismo tiempo que este tipo de producción puede significar un negocio rentable y sustentable.
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