El frío extremo que ronda por los 20º bajo cero, las elevadas alturas, los riesgos de avalanchas y emergentes problemas de salud no pudieron con un sueño: Facundo Arana llegó a la cima del Everest.
El monte más alto del mundo siempre fue una meta a alcanzar para el actor, sin embargo, en años anteriores un edema pulmonar y posteriormente uno en el cerebro, se lo impidieron.
Si bien en esta ocasión estaba acompañado por un equipo de profesionales dispuesto a asesorarlo en cada momento, lo primero que lo empujó a lograrlo fue su determinación.
Despojado de todas sus comodidades, optó por conectarse con lo más rústico de la Naturaleza exponiéndose a sus extremos a cada rato. Fue así como reportaba su travesía a los fans por medio de Instagram y Twitter, lo que convocó a miles de espectantes que también se unieron a la causa.
El martes 24 de mayo llegó a destino, seguro de que nada de eso tendría sentido si, al volver a casa, no podría darle un eterno abrazo a sus tres hijos y su mujer.
Comentarios
Powered by Facebook Comments