Descubrí que en Misiones hay muchísimo más que cataratas y es la…
Conocí un paraíso argentino y quise quedarme ahi para siempre: el Norte de Misiones. Una vez que llegué entendí que las cataratas no son lo único disfrutable de la zona, sino que fue la misma selva la que me conmovió, renovó y recicló también ¿por qué no? 
En su biodiversidad los nativos encuentran sus medicinas desde hace siglos: raíces y hojas que sanan infecciones, ¡tantas que purifican los riñones! y hasta aminoran dolores de muelas, o sirven para la higiene personal (y se biodegradan una vez digeridas o usadas, sin contaminar el agua, obviamente).
En sus noches encontré la verdadera oscuridad: la luz de luna no siempre logra filtrarse entre la densidad de inmensos árboles y plantas.
Durante estas horas noté que todo en el bosque no solo se interconecta por plantas rastreras, inmensas y perfectas telarañas o lianas; sino que también lo hacen sus animales, que se oyen comunicándose en su propio idioma y, detrás de esas conversaciones silvestres, está el alivio del mismísimo silencio.
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