Stephen Hawking no siente que tiene una enfermedad, por el simple hecho de que…
Stephen Hawking es uno de los intelectuales más reconocidos de nuestros tiempos dado que domina varios campos de la ciencia, siendo físico teórico, astrofísico, cosmólogo y además se dedica con empeño a la divulgación de todos sus estudios.
Todo esto es en sí mismo un mérito, sin embargo, se multiplica de forma infinita por su condición de salud: a los 21 años se le presentó una escleriosis lateral amiotrófica (ELA), lo que paraliza su sistema nervioso a tal punto de que los médicos decretaron que no superaría 3 años con vida.
Por el contrario, si bien la patología avanzó, este año llegó victorioso a los 75… con un entusiasmo que conmueve, haciendo aportes a la ciencia y al mismo sistema que utiliza para comunicarse (una computadora que registra el movimiento de su mejilla y así formula sus palabras, se mantiene informado, trabaja), tecnología que también se brinda a disposición de forma gratuita a gente con las mismas dificultades motrices.
Su vida y obra son un milagro hasta para los más escépticos y, más allá de que cuenta con la mejor atención médica, su actitud parece ser lo que transmuta todo. El motor de Hawking es que se encuentra seguro de que no padece ninguna enfermedad, solamente por el hecho de que tiene objetivos. Es decir que carecer de ellos, sería el verdadero desastre.
¿Cuáles son? Desafiarse profesionalmente, admitiéndose los errores que puedan surgir y, con un gran sentido del humor mediante, se dio el gusto de tener su propia familia y siempre disfrutar de cada momento. Por todo esto, ¡admiramos su forma de comunicar que, bajo cualquier circunstancia, se puede llevar una Vida Sana!
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